
Mi año no podría haber terminado mejor.
Se sanaron mis llagas del alma. Queme mis rencores y penas enfrascadas.
Aprendí a aceptar, a perdonar y simplemente a no juzgar.
Esta vez me desahogue sin lágrimas, sino que con palabras.
Y entendí que la comunicación es fundamental para cualquier tipo de relación
Para cualquier comienzo de amor.
Me siento mas completa, mas dichosa y mas mujer.
Y todo gracias a que comprendí como lograr ser mejor hija.
Sin duda hoy me siento mejor persona.
Y espero poder proyectarlo por lo que me queda de vida.
Feliz año! A todos los que quiero y a los que me falta por conocer.